Después de limpiar y secar bien el rostro, aplica con el aplicador de bola metálica una pequeña cantidad en el contorno de ojos. Usa movimientos suaves para masaje y distribución del producto.

Definir el área: Aplica en forma de ‘C’ alrededor de los ojos, sin colocar demasiado cerca de la línea de pestañas para evitar irritación o migración del retinol hacia el ojo propiamente dicho.

Cantidad adecuada: Usa solo la cantidad necesaria, como del tamaño de un guisante como máximo; más no acelera resultados y puede aumentar irritación.

Frecuencia:

• Comienza con 1 o 2 noches por semana, especialmente si es tu primera vez con retinol.

• Si tu piel lo tolera bien, puedes gradualmente aumentar la aplicación a noches alternas o incluso diario según tolerancia.

Uso nocturno exclusivo: No se debe aplicar durante el día ya que el retinol se descompone con la luz ultravioleta y puede causar fotosensibilidad.

Combinar con hidratación: Puedes usar después tu crema hidratante habitual para reforzar la barrera cutánea y minimizar sequedad o descamación.

Protección solar diaria indispensable: Durante el día debe usarse un protector solar con al menos SPF 30, ya que el retinol aumenta la sensibilidad al sol.